«Sobre los vivos y los muertos (Palabras por Ernesto García Camarero)»

Se recogen aquí en texto y en vídeo (ver abajo), las palabras de apertura de Miguel Pastrana de Almeida, Presidente de la Agrupación Ateneísta «Juan Negrín» del Ateneo de Madrid, en el acto público que llevó por título «Ernesto García Camarero, científico de compromiso social. 1er aniversario, in memoriam«, el 26 de noviembre de 2023. Estuvieron también en la mesa, Isabel Baeza, periodista. Luz Macías, escritora. Joaquín Fernandez, Catedrático Emérito de Biología Celular en la UCM e historiador de la Ciencia. Pedro García Bilbao, profesor de Sociología en la URJC y Presidente de Honor de la Agrupación Ateneísta «Juan Negrín». Montaje de vídeo, Luis Miguel Rico Quintana y en base a las grabaciones de dos personas del público.

Buenas tardes. Gracias por su asistencia a esta asociación con dos siglos de vida ya, a la que se conoce, abreviando, como “Ateneo de Madrid”, pero cuyo nombre oficial, completo, es Ateneo Científico, Literario y Artístico de Madrid.

Y esto guarda relación con cuanto hoy aquí nos reúne; el recuerdo de un gran científico, matemático, de talla mundial, y de un ateneísta; comprometido con la defensa de la forma organizativa social histórica, democrática, de este Ateneo.

Hablo de Ernesto García Camarero, quien tal día como hoy de hace un año, dejaba el plano físico de la existencia; lo que suele llamarse morir. ¿Hay otros planos de existencia, otras formas de vivir? Y no lo planteo exactamente desde la fe, aunque yo la tenga. Pero no hablo yo ahora propiamente de eso. Diría, más bien, de energía. Algo que es Ciencia. Que es Pensamiento. Y también –también…-, es Ejemplo.

Así, yo creo que algo queda…; algo que a veces es mucho, es tanto, y nos influye, y nos impele, y nos despierta. Como una vibración en la noche, una cuerda tensa que oímos muy al fondo, casi inaudible, pero la sentimos, y entonces, todas esas vidas que fueron, laten, las escuchamos, vuelven a nosotros aunque se marcharan hace mucho tiempo. Y permanecen. Porque todo cuanto latió alguna vez, ya permanece. Y creo también que eso es lo que construye a cuanto llamamos la Humanidad. Los vivos y los muertos. Eslabones. Una cadena.

Hoy estamos aquí, en este Ateneo –y quiero agradecer a Luz Macías, de quien surgió la idea-; estamos aquí, en una sala que se llama “Ramón y Cajal”, ateneísta, científico. Hacemos este acto con una Agrupación que lleva el nombre de otro científico, ateneísta, “Juan Negrín”, que fue discípulo de Cajal, y fue amigo y coetáneo de Julio Rey Pastor, el gran matemático, quien a su vez, fue el mentor de Ernesto García Camarero, nuestro amigo, maestro también, nuestro consocio de este Ateneo. Como todo eso era también Carlos París, el filósofo, el Presidente. Contemporáneo de Ernesto, amigo. Le recordaremos aquí el 31 de enero, cuando se cumplan diez años de su muerte. Porque, en cuanto a nosotros respecta, no están muertos. No en un cierto plano. Y nosotros estamos hoy aquí por todas estas personas y por muchas más. Por ellos, por ellas.

Y esa es la cadena humana a la que antes me refería y es, como yo lo creo, una forma de existencia inmarcesible. De vida. En la que estamos, juntos, quienes nos decimos “vivos” y a quienes llamamos “muertos”.

“Con el amor a cuestas, dormidos y despiertos / seguiremos besándonos en el hijo profundo. / Besándonos tú y yo se besan nuestros muertos, / se besan los primeros pobladores del mundo”

Dejó escrito otro ateneísta, Miguel Hernández. Su retrato está en algún pasillo interior; antes estaba más visible, ahora más en sombra.

No importa. Nosotros, nosotras, recordamos. Y lo hacemos de manera íntegra, pues otra cosa, sería insultar a las personas que un día fueron.

Y así, hoy recordamos a Ernesto García Camarero, el científico. Pero también, al humanista, a la persona comprometida por un mundo sin guerras, sin hambre, sin explotación. Sin privilegios de clase social.

Y recordamos al ateneísta quien defendió, está escrito, el Reglamento histórico de esta Asociación. Que sigue vivo.

Gracias.

Cartel del acto

Vídeo de la grabación